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“UN CUENTO CHINO” QUE VINCULA: PESCA E INFORMACIÓN CON EL FUTURO. LA SORPRESIVA REVOLUCIÓN EN EL MAR.

CN (RE) Dr. Javier Valladares*


Muchas veces me he encontrado frente a una hoja en blanco, para escribir un trabajo específico de mi profesión, o ante un documento requerido por una actividad determinada.

En general, me siento seguro cuando conozco el tema a desarrollar o cuando conformo un equipo en donde el conjunto supera a las partes y las ideas fluyen en forma compartida.

En este caso pretendo abordar dos temas muy complejos, de los cuales no soy especialista, pero debido a su vigencia y actualidad están generando una nube de documentos recientes, muchos de ellos escritos por colegas, amigos, respetados e idóneos, pero siento la necesidad de compartir con ustedes los lectores otra aproximación a estos temas, en este caso para no iniciados, donde quede expuesta la importante vinculación que entre ellos tienen y el impacto que generan para nuestro país.

Quizás mi pretensión es, cual un director de orquesta algo osado y en esto novato, intentar alinear la diversidad de instrumentos que están sonando, no siempre en la misma sinfonía, en torno a la temática de la “Pesca y a la Gestión de la Información” en las regiones oceánicas de nuestro interés.

Estamos en el siglo XXI, en un país del hemisferio sur, que si bien en ocasiones se declama marítimo en general le ha dado muy poca atención al océano. ¡Por lo tanto para abordar estos temas, conviene hacerlo primero analizando la situación actual en el mar!

Situación actual:

La globalización es una tendencia que, si bien esta pandemia COVID 19 en parte la freno o modero, sigue una tendencia claramente asociable con el desarrollo, donde el aumento de la empatía, social, ambiental, económica trajo beneficios para quienes la siguieron con inteligencia y planificación. Ese tránsito hacia lo global va requiriendo cada vez más conectividades, incentivando las iniciativas innovadoras, deseablemente interdependientes que van generando un creciente consumo de bienes y servicios.

La tendencia opuesta a la globalización, serían los aislacionismos, cada vez más difíciles de mantener, pero aún presentes en el otro extremo; ambas posiciones más cualquier estadio intermedio, presentan demandas similares y también crecientes sobre los recursos de los países. Es en esta situación donde la información/ conocimiento de estos recursos juega un rol fundamental, quizás como el más importante modelador del actual orden internacional.

Información que resulta al mismo tiempo ser la constructora de una conciencia global o planetaria, que con matices va volcando las balanzas hacia un mundo cada día más complejo e interdependiente. Esta información, resulta ser el componente central de los procesos que se asocian con el “big data”, inductor y pronto administrador de ese “nuevo orden” asociado con la complejidad; desde el cual nos van pautando lo bueno y lo malo para cada circunstancia según la apreciación de las mayorías (o lo que la propaganda o los que tengan el poder de tomar decisiones induzcan sobre ellas).

El mayor conocimiento del espacio oceánico permitirá optimizar las intervenciones y el protagonismo de los estados, organizaciones internacionales e incluso del sector privado, y por medio de estas participaciones inteligentes se irán generando los criterios que se aplicarán para establecer políticas que finalmente se adoptarán en los foros internacionales específicos.

En nuestra región, el que posea más y mejor información científica del Atlántico Sudoccidental, tendrá mayores posibilidades para establecer sus criterios en las regulaciones de los recursos por ejemplo pesqueros; por ese motivo es muy importante el seguimiento de los programas de investigación y la participación en los foros donde se de tratamiento a temas identificados como de interés nacional. Tales como la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos, (1) o la eventual conformación de una Organización Regional de Ordenamiento Pesquero (OROP) (2) para el Atlántico Sur área identificada como 41 del sistema de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Obviamente, estos espacios multilaterales requieren una fina evaluación de su conveniencia y demandan un adecuado balance entre los intereses científicos y políticos, evitando el riesgo de internacionalizar la región, pero si pueden resultar positivos si permiten generar alianzas que protejan y desarrollen los intereses que resulten coincidentes entre el país, la región e incluso los globales. Siempre el cooperar implica una cesión de algo, pero debe ser a cambio de un beneficio considerado igual o mayor; peligroso sería que los actores presentes en el escenario (3) no encontraran motivos o justificación para el diálogo o peor aún que las cosas ocurran directamente sin nuestra participación.

Un interesante ejemplo de aplicación de este criterio, por el cual la información y el conocimiento pautan la agenda temática política, lo expuso el ex presidente Obama de los EEUU, durante su gobierno, cuando utilizó el concepto de “diplomacia científica”, (4) una forma moderna de vincular el conocimiento científico con la geopolítica. Es como implementar un “Nuevo Caballo de Troya”; cuando las diferencias de intereses y posición política quedan muy expuestas y los intercambios de información se hacen difíciles, el uso de los argumentos científicos son siempre una puerta abierta al diálogo y una posibilidad de encontrar y empezar por las cosas simples de común interés antes de mantener una relación discutiendo solo las diferencias.

Claro nadie aclara la diferencia entre ser el diagramador de las experiencias observacionales y liderar las líneas de investigación, por sobre la alternativa de ser un simple acompañante o socio fortuito de un programa científico. Pero siempre participar de las observaciones es, reitero siempre, mejor que no saber lo que pasa en el borde o incluso dentro de nuestros espacios jurisdiccionales.

Que problemas se observan en este escenario marino:

La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR- o en ingles UNCLOS), pensada en las décadas sesenta y setentas y aprobada en los ochenta del siglo XX, resultó ser un excelente documento producto de un delicado juego de intereses entre países costeros y no costeros, desarrollados o no, globalizados o no; fue el producto de años de negociación diplomática. Pese a que algunos países no se adhirieron, en la práctica resultó ser la referencia para pensar los espacios marinos y la herramienta para proyectar el futuro de la humanidad en el mar.

El documento establece un delicado balance entre espacios jurisdiccionales con derechos para los estados costeros y otros espacios donde no se aplican esos derechos soberanos, donde podríamos decir que el atributo más destacado es la libertad. La “alta mar”, más allá de la zona económica exclusiva, y “la zona” de los fondos marinos más allá de las plataformas continentales, pueden ser considerados como escenarios globalizados. (5) (Espacios Marítimos, vistas: 3D y perfil)


Espacios Marítimos (vista 3D)
http://www.plataformaargentina.gov.ar/es/gráfico-espacios-marítimos





Espacios Marítimos (vista perfil)
https://www.argentina.gob.ar/armada/intereses-maritimos/espacios

En particular “la zona” queda comprendida junto con “el espacio ultraterrestre” y “el espectro electromagnético”, este último muy discutido, como “Patrimonio Común de la Humanidad”.

En el mar los límites no se materializan por alambrados, zanjas o hitos, estos espacios jurisdiccionales son establecidos por meticulosos procedimientos acordados por la CONVEMAR. En estos escenarios la observación sistémica en algunos casos convertida en vigilancia, para recolectar información es compleja y desarrollada desde múltiples plataformas, muchas de las cuales traspasan estas fronteras soberanas; generando gigantescos flujos internacionales de información, hacia repositorios de datos, nodos o hub’s de procesamiento que según su contenido son gestionados por quienes tienen la tecnología y capacidad para hacerlo, sobre ellos converge una diversidad de datos útiles producto de la fusión de múltiples fuentes, abiertas pero también de las que, aun teniendo restricciones, se puede acceder en forma directa o indirecta. (Mapa de Espacios Marítimos)

La información del escenario marítimo en el Atlántico Sur y la zona superpuesta con el tratado Antártico (peligrosamente llamada por algunos en los últimos años como Océano Austral), que se sube a las plataformas de tecnología de la información (TI) contribuye de múltiples formas a mejorar el conocimiento del medio y al comportamiento de los hombres en él, incluso valiéndonos del entrecruzamiento de este gran volumen de datos (propio del big data) a cuantificar recursos, evaluar oportunidades, predecir tendencias y comportamientos.



Mapa de Espacios Marítimos
http://www.plataformaargentina.gov.ar/mapaPlataforma

Con un enfoque colaborativo donde todos los actores presentes puedan resultar beneficiados, esta colección de información se obtiene, según quién hace la observación, de la siguiente forma:

1- nivel nacional, en general es poco significativa y abarca:

    1.1- in situ desde buques, vehículos no tripulados con sensores, instrumentos derivantes, plataformas marinas, en general colectados en contacto con el mar.

    1.2- por sensores distantes, aeronaves, estaciones costeras, satelitales propios (la mayoría orientados para realizar observaciones o brindar servicios sobre el continente, solo el SAC-D estuvo y el futuro Savia estará enfocado en el mar).

2- nivel internacional se entremezclan las capacidades de algunos países con intereses globales y las del sector privado, (6) cada día más presente:

    2.1- in situ desde plataformas en contacto con el mar, generalmente comprendidas en la categoría de “Investigación Científica Marina” (descripta en la CONVEMAR) o en la más reciente “Oceanografía Operacional” más enfocada en colectar datos (como la meteorología) para brindar servicios oceánicos/climáticos, para la gestión costera y los espacios marítimos.

    2.2- sensoramiento y servicios remotos satelitales realizados en la región principalmente por programas: internacionales, de Estados Unidos de Norte América (EEUU), República Popular China (China) y Reino Unido de Gran Bretaña (RUGB).

      2.2.1 comunicaciones (que además suman información de oportunidad, tal como ubicación y tipo de estaciones, o la meteo que impera en la región):

        a- Inmarsat (constelación de satélites geoestacionario) donde se apoyaba inicialmente el sistema GMDSS (para la salvaguarda de la vida en el mar)

        b- Iridium (constelación de satélites de orbita media - baja) con cobertura en los polos.

      2.2.2 Las imágenes y datos obtenidos estratégicamente desde satélites, pueden brindar información para elaborar modelos predictivos (basados en machine learning) que permiten diferentes aproximaciones al conocimiento y los servicios, por ejemplo:

        a- las variabilidades climáticas, oceanográficas, biológicas;

     b- el seguimiento de algunas actividades humanas (por ejemplo, los sistemas: ayudas a la navegación- AIS, identificación y seguimiento de buques- LRIT, la administración de la trazabilidad de la carga transportada- TMS, plataformas unificadas de seguridad- VMS, la pesca);

         c- los servicios para múltiples usos (“data as a servicie” – DAAS, por ejemplo, para la gestión de áreas marinas, costeras o las actividades deportivas), producto de la gran oferta de datos de variado origen, que con un adecuado procesamiento se convierte en esos servicios.

Pasar de la información al conocimiento del escenario, es algo que demanda compromiso, participación y responsabilidad de cada uno de los actores allí presentes. El Atlántico Sur y la región Antártica presentan intereses muy variados, incluso algunos no valorados de igual manera por los actores, lo que lleva a un esfuerzo observacional poco coordinado en la región y a errores en la evaluación de riesgos, por diferencias en la valoración de las amenazas y/o en las vulnerabilidades atribuidas al escenario.

Administrar la información 7

Las actuales potencias de escala global EEUU y China, más unos pasos atrás RUGB (8) y Rusia son las que tienen la capacidad de subir comandos y bajar datos de sus respectivos satélites, y también integrar esa información con la proveniente de otras fuentes propias o no, atraídas con la argumentación de gobernanza colaborativa, para de este modo conformar la información de base para los escenarios de interés. (mapas: evolución del tendido de cables submarinos en menos de dos siglos)



Primer cable submarino su tendido se inició en 1857.
https://www.adslzone.net/reportajes/internet/mapa-cables-submarinos/



Cables tendidos en enero 2020 según “TeleGeography”
https://www.submarinecablemap.com/#/

Pero entre estas potencias, las dos primeras se encuentran en una competencia en que: por costos y eficiencia en los enlaces transcontinentales los flujos de datos fluyan a datacenters administrados por ellos, convirtiendo a su infraestructura de transporte y almacenamiento en nodos desde donde se puede comenzar a parametrizar tendencias, evaluar comportamientos, incidir sobre factores culturales, a ejercer poder.

Esta situación, podría ser interpretada según el “realismo periférico” (9) como una disyuntiva, frente a la cual nuestro país deberá elegir entre las reglas, con las cuales se gestionarán los datos y la información, que proponen las distintas potencias de escala global.

Generalizada bajo el nombre de 5G (quinta generación de tecnología celular), la competencia de las tecnologías disponibles desató la “guerra del 5G”, y al despliegue de redes de datos que está realizando China se lo describe como una nueva “ruta de la seda”, que en su planificación está abarcando en nuestra región: tendido de fibra entre Valparaíso y Puerto Williams, en la Hidrovía Paraná Paraguay, el cruce entre Angola y Brasil e incluso posiblemente el cruce de la Antártida.

Administrar las bases de datos globales y regionales es tener la capacidad, a través del conocimiento, para incidir sobre los intereses allí presentes, por ejemplo, los recursos genéticos de los fondos marinos, o de la pesca.

Sin dudas, la elección de qué camino seguir entre estas líneas y políticas tecnológicas es uno de los principales desafíos estratégicos, del presente para nuestro país

La pesca:

El Atlántico Sur está identificado como uno de los principales caladeros (8ᵛᵒ) del planeta, la globalización y el gran crecimiento demográfico (estamos viviendo uno de los más largos períodos de paz en la historia de la humanidad) representan una demanda incesante y creciente de recursos naturales.

El esfuerzo pesquero sobre la biomasa, en los espacios marítimos procura junto con la acuicultura contribuir en forma significativa con las proteínas demandadas por la humanidad. Pero cuando este esfuerzo se realiza fuera de los ámbitos jurisdiccionales de los estados costeros, más allá de las 200 millas, esta pesca si bien no es ilegal, no queda regulada y sus capturas no suelen ser declaradas verazmente; convirtiendo por esta incertidumbre casi en no renovable un recurso como la pesca en alta mar, que por definición se encuadraría como renovable.

Independientemente del régimen político que adopten, todos los países, al menos declamatoriamente, procuran la buena alimentación para su población. Agotados o comprometidos por otros usos, los espacios terrestres no alcanzan para satisfacer esta demanda, y el mar en particular la alta mar, se convierte en el ámbito objeto de interés como fuente de alimentación.

La pesca estimada, en 2018 según la FAO, fue de 179 millones de toneladas, donde casi el 90% fue dedicado al consumo alimentario, del total casi la mitad provino de la acuicultura (actividad de muy bajo desarrollo en nuestro país) y la otra mitad de la captura en altura o en agua dulce.

La falta de observaciones sistémicas sobre el recurso pesca, permite que en algunos caladeros ocurra sobrepesca (de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU el objetivo 14.4 – era acabar con la sobrepesca en 2020 -) y un descarte descontrolado de las especies no deseadas (estimado por FAO en un tercio de la pesca mundial).

Hace casi dos décadas atrás un almirante de nuestra armada, (10) escribió un breve documento, muy pragmático denominado “Conjugando el Mar”, en el describía acciones que armada y país debían desarrollar en el mar, que hoy podríamos adaptar en el siguiente resumen: observar (en forma conjunta y combinada) para conocer más, obrar (con responsabilidad y tecnología) para usar bien, “gestionar el mar” (inteligentemente con argumentos sustentables) para que duren sus recursos (en forma sostenibles) y procurar que se mantenga como un espacio seguro para la vida y las actividades humanas.

Quiero resaltar que intencionalmente al final, adopte el verbo gestionar en lugar de los utilizados habitualmente: controlar, proteger, vigilar, disuadir, vedar, impedir, y algunos más. No porque no representen acciones posibles o importantes sino porque todos quedarían comprendidos dentro de una adecuada gestión; que es además el verbo que mejor permite trascender de los espacios jurisdiccionales con plenos derechos a los espacios que la CONVEMAR le otorga a la humanidad toda, pero en donde nuestros intereses y responsabilidad también deben estar presentes (integrando una mirada interagencial).

Podemos generalizar que la irresponsabilidad humana es la principal amenaza (11) para un espacio vulnerable como el mar. Esto implica educar, capacitar para reducir los actos irresponsables, observar y conocer mejor los procesos marinos y acciones de la humanidad en el mar.

Varias organizaciones no gubernamentales (ONG´s), que evalúan la pesca ilegal (que movió estimativamente según el Banco Mundial en 2019: 1,5 billones de U$D), no declarada y no regulada (conocida bajo la abreviatura de INDNR), presentan a China como el país peor calificado durante 2019 respecto a estas actividades.



Buques pesqueros chinos cruzando del Pacífico al Atlántico.
http://www.polosproductivosreg.com.ar/2020/07/16/pesca-ilegal-chile-confirmo-el-paso-de-30-buques-chinos-a-mar-argentino/

En esos mismos ámbitos se identifican a los principales países pesqueros: China, Indonesia, Perú, India, Rusia, EE.UU. y Vietnam; estos sumados representan casi el 50% de capturas en 2018. En tanto que la acuicultura representa también en 2018 el 52% del pescado para consumo humano, siendo los principales productores: China, India, Indonesia, Vietnam, Bangladesh, Egipto, Noruega y Chile.

China tiene organizadas las Milicias Marítimas que funcionan como flotas pesqueras, itinerantes por el mundo (en algunos informes se habla de 17.000 buques), pescando en los límites de las ZEE de los países costeros. Estas milicias/ flotas son parte del estado chino, identificada en muchos lados como la otra armada de Xi Jinping (líder del gobierno de China), parte de ellas entre diciembre y marzo se posicionan para la pesca del calamar en el Atlántico Sudoccidental, operando en la milla 201 por fuera de nuestra ZEE.

Esta Milicias Marítimas conforman un componente más del poder naval chino, especialmente apta para intervenir en situaciones de crisis no convencionales, sus buques pesqueros, en ocasiones no colaborativos, se convierten en un problema para las autoridades de los países costeros.

La falta de regulación pesquera en nuestra región sobre las aguas internacionales, impide evaluar adecuadamente la sostenibilidad de los recursos blanco de la pesca en esas aguas, esta situación también dificulta cuantificar la sobrepesca o evaluar el descarte (12) sobre especies no deseadas. La FAO para desalentar la pesca (INDNR) y minimizar el daño que ocasiona en la alta mar, desarrolló un Plan de Acción Internacional para Prevenir, Desalentar y Eliminar la Pesca Ileal, No Declarada y No Regulada, pero pese a que lleva casi veinte años no alcanzó el éxito esperado.

Cualquiera de las soluciones que recientemente desde: la FAO, ONG´s y desde la Organización Mundial del Comercio, se vienen esgrimiendo para minimizar el daño de la pesca INDNR (ilegal, no declarada y no regulada) tales como: acuerdos bilaterales, multilaterales como la creación de una OROP, recorte de subsidios y subvenciones a la pesca, las cuotas individuales transferibles (cupos de captura); todas, absolutamente todas, demandan de un conocimiento previo del escenario.

Conclusión:

China es un actor extra regional, que en su camino a convertirse en potencia global viene realizando actividades en nuestra región que se pueden resumir en:

    1 Presencia anualmente de una porción significativa de su Milicia Marítima en el Atlántico Suroccidental y en sectores Subantárticos reclamados soberanamente por la Rep. Argentina, para realizar una pesca LDDNR (legal, dudosamente declarada y no regulada).

    2 Desarrollo de infraestructuras y facilidades, tecnológicas aptas para atraer hacia el nodo por ellos administrado, toda la información de la región. Y de esta forma alcanzar el conocimiento que permita gestionar este escenario marítimo.

Tras tener identificada y habiendo apreciado esta situación, nuestro país, se encontraría ante las siguientes opciones de comportamiento (no excluyentes entre sí), que deberían ser parte de un pensamiento estratégico nacional:

    a Dejar que todo siga como actualmente, permitiendo (ahora en forma consciente) a China lentamente competir (contra REGB/EEUU) para convertirse en potencia con capacidades e intereses hegemónicos en la región.

    b Incrementar la participación y presencia argentina en los foros regionales, aunque no se alcance un protagonismo central igual se debería procurar un adecuado balance de intereses entre los actores presentes en el escenario, evitando de ese modo que una sola potencia global polarice la gestión regional o peor aún que se desate una escalada en la competencia de intereses entre las potencias globales.

    c Optimizar y coordinar:

        c.1 el esfuerzo interagencial de observación para la investigación y vigilancia de los espacios jurisdiccionales argentinos y sus áreas adyacentes de alta mar para minimizar los efectos de la pesca INDNR.

          c.2 el esfuerzo pesquero bajo jurisdicción argentina, adoptando políticas para minimizar la pesca INDNR y el descarte, según los mejores criterios científicos que den sostenibilidad a los recursos regionales.

        c.3 una base de datos oceánicos, ambientales y biológicos de fuentes nacionales, administrada en forma unificada, que se pueda complementar y fusionar con información de origen internacional para contribuir al mejor conocimiento de este escenario marino.

Documentos de circulación recientes y periodísticos que sirvieron de antecedente:


• DI CHIARO, Paola; PÉREZ LEÓN BARRETO, Máximo. (2021) “Cooperación internacional para combatir la pesca ilegal” Infobae

• DOMINGUEZ, Néstor (2020) “Patrimonio Común de la Humanidad”, Boletín del Centro Naval 853

• ESCUDÉ, Carlos (1992). “Realismo periférico: Bases teóricas para una nueva política exterior argentina”. Buenos Aires: Ed.Planeta

• GALIA, Francisco. (2020) “Pesca INDNR”. Charla en la Academia del Mar (Con presentaciones de: Gustavo Castillo, Alejandro Canio y Hugo Miguel) y documento “Academia del Mar Pesca”.

• GARCÍA MORITAN, Roberto 6/12/2020 “Atlántico sur: no hay buena geopolítica sin conocimiento científico”. Diario Clarín.

• GORRIZ, Gustavo (2020) “Mar Argentino: apuntes para una política oceánica que ponga en valor nuestras riquezas”. Infobae

• LERENA, Cesar Augusto, (2020) “La pesca argentina en alta mar es un ejercicio soberano impostergable” Web del autor.

• LERENA, Cesar Augusto (2019) “El PBI del Atlántico Sur Argentino” Web del autor.

• LERENA, Cesar Augusto (2020) “Plan de Desarrollo Pesquero Nacional y el Camino a la Soberanía en las Malvinas – Mejor que decir es hacer, mejor que prometer es realizar” Web del autor.

• LORENZ, Konrad. (1975) “Los ocho pecados mortales de la humanidad civilizada” Plaza&Janes Ed.

• MIGUEL, Hugo (2020) “Nuevas tecnologías para el control del mar y la protección de la actividad pesquera”. Presentación hecha en la ACMAR.

• MIGUEL, Hugo (2020) “Nuevas tecnologías para el control del mar” Revista DEF 135

• MOLINA CARRANZA, Daniel “Panorama Pesquero al año 2019” conferencia dada en la Academia del Mar.

• PÉREZ IZQUIERDO, Laureano 15/8/2020 “La otra armada de Xi Jinping: el preocupante saqueo de mares que crece al amparo del régimen chino”. Infobae

• PÉREZ IZQUIERDO, Laureano 4/12/2020 “Al menos 27 barcos pesqueros chinos llegaron al Atlántico y amenazan los recursos naturales del Mar Argentino: las imágenes satelitales”. Infobae

• PLANELLES, Manuel (2015) “Pacto para proteger la biodiversidad de los océanos en la ONU”. Diario El País (Madrid) 27/1/2015.

• RECALDE, Cesar 1/12/2020 “Alerta Estratégica: la Milicia Marítima de China, una amenaza que viene del mar”. Infobae.

• RECALDE, Cesar 10/12/2020 “” Big Data” del mar: las huellas de los buques en la nube”. Infobae

• ROCA, Mariano. (2020) “La protección del Mar Argentino”. Revista DEF 135 (nota de tapa)

• TERRIBILE, Horacio. (2020) “La pesca en la Argentina” reportaje en Ser Industria Radio.

• “Brexit and its impact: no representation of the Falklands case to the EU”. (2020) en.mercopress.com

• “El valor geopolítico de la pesca” (2020) www.embajadaabierta.org/post/

• “Estados Unidos envió un buque de la Guardia Costera a patrullar el Atlánticos Sur, para contrarrestar la pesca ilegal” (2020) Infobae.

• “Falkland Islands Government warns about the negative impact of an EU Brexit on the Falklands´ economy” (2020) www.fiassociation.com/article/638

• “Investigaciones biológico-pesqueras y ambientales en la Zona Común de Pesca Argentino-Uruguaya” (2013) 151 Sesión Plenaria Ordinaria Academia del Mar

• “La Ruta de la Seda en 2020. La gran herramienta geopolítica de la pospandemia para el sur global” Sebastián Schultz (2020) https://www.academia.edu/s/5bbb5b9371?source=ai_email

Agradecimientos:

Por su lectura crítica y aportes: Señores Al. E. Molina Pico, Cl C. Recalde, CN H. Terribile, Cap. D. Molina Carranza, Mg. Hugo Miguel.



1. Esta Convención firmada en Hobart, Australia en 1980 entró en vigor en 1982 forma parte del Sistema del Tratado Antártico https://www.ccamlr.org/es/organisation/pagina-de-inicio
2. Las Organizaciones Regionales de Ordenación Pesqueras (OROP) son organismos o acuerdos intergubernamentales de pesca con autoridad para establecer medidas de conservación y gestión de pesquerías en alta mar. http://www.fao.org/iuu-fishing/regional-mechanisms/es/
3. Entendiendo por escenario la suma del espacio geográfico y los actores allí presentes
4. http://revistafal.com/diplomacia-cientifica-en-el-mundo/
5. CONVEMAR - Parte VII Sección 1 - Art 87 Libertad de la Alta Mar, Art 88 Utilización exclusiva de la alta mar con fines pacíficos, Art 89 Ilegitimidad de las reivindicaciones de soberanía sobre la alta mar, Art 90 Derecho de navegar. / Parte XI Sección 2 – Art 136 Patrimonio Común de la Humanidad, Art 137 Condición jurídica de la Zona y sus recursos, Art 141 Utilización de la Zona exclusivamente con fines pacíficos.
6. Por ejemplo, laboratorios que estudian recursos genéticos, agencias espaciales que utilizan zonas de alta mar (en particular en el Pacífico) para hundir los satélites que caen en desuso, agencias climático-ambientales que brindan servicios de prognosis
7. Si bien con más propiedad debería decirse “Gobernanza de la Información”, en este punto se utiliza administración con un sentido más doméstico, asociable con la acción inicial para las organizaciones que intervienen en el sistema de gobierno de cualquier actor con interés en la región.
8. Reino con el cual nuestro país, mantienen una disputa por el ejercicio de la soberanía sobre las islas Malvinas, Islas del Atlántico Sur y sus aguas circundantes. La alternancia en las políticas argentinas para realizar el seguimiento de este conflicto de intereses, conlleva a limitaciones para establecer una estrategia nacional y dificulta encontrar posiciones de común beneficio ante amenazas extrarregionales.
9.Teoría de las relaciones internacionales, elaborada por el Dr. Carlos Escudé, que atribuye diferencias jerárquicas entre los estados (algunos, las potencias globales, imponen reglas de juego y otros que voluntaria o accidentalmente se alinean con ellas).
10. El VL(RE) Carlos Carbone, en ese entonces Comandante de Operaciones Navales
11. Los ocho pecados mortales de la humanidad civilizada, documento del Premio Nobel Konrad Lorenz
12.Observación del autor, siempre donde dice Falklands debe entenderse por “Malvinas”


*Javier Armando Valladares es doctor en Geografía, licenciado en Oceanógrafía, especializado en Geofísica del petróleo. Capitán de navío retirado de la Armada Argentina.
Ex Jefe del Servicio de Hidrografía Naval, Agregado Naval y Jefe de la Misión Naval en EE.UU. y Subsecretario de Intereses Marítimos.
Participó en numerosos foros internacionales vinculados con temas de investigación científica marina y ambiental, en la Organización Marítima Internacional y en el Bureau Hidrográfico Internacional. Representante argentino ante la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de UNESCO, electo como Vicepresidente entre 2003 y 2007, y su Presidente también electo durante dos mandatos desde 2007 hasta 2011.
Miembro de número de la Academia del Mar (actual Presidente).
Miembro del Consejo de Administración del Instituto Tecnológico de Buenos Aires y su Oficial de Cumplimiento (Compliance).
Miembro de Número Académico del Instituto Nacional Browniano.





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